Estamos ya en el final del cuatrimestre, tan sólo nos queda una semana, dos clases más.
Durante este cuatrimestre hemos seguido un proceso, que podemos dividir en dos bloques muy generales, uno de toma de contacto con el dibujo, con el mundo gráfico y con esta asignatura y otro bloque en el que nos hemos metido más en el problema de dibujar las figuras.
Estas últimas semanas además hemos incluido el espacio y su representación, pero todo lo que hemos estado dibujando eran cosas sabidas y conocidas, que todos podemos ver. Y sin embargo, el trabajo de un arquitecto no es ese, no es representar la realidad tal y como todo el mundo la percibe, sino inventar figuras tridimensionales habitables, que es lo que hace al proyectar. No se trata de reproducir realidades sino de crearlas.
Pero este proceso de proyectar, pasa por la abstracción y por la pura geometría. Hasta convertirlo en un lugar evocador, en un mundo nuevo en el que te puedas sumergir y recorrer, y recorrer y que te envuelva.
Para crear estos mundos, estos lugar nuevos, utilizamos el dibujo, es nuestra herramienta para enseñar a todos los demás y al mundo, aquel lugar o el proyecto que tu deseas. Y para ello también sigues un procedimiento de dibujo.
Hoy se trata de hacer dibujos evocadores de la clases, que estén en un punto justo entre la abstracción y el mirarlo de una forma figurativa, solo a través de figuras geométricas de luz y de sombra.
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